ACERCA DE
La academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas es la Academia Iberoamericana más longeva, Nace en 1946 como respuesta a un momento de esplendor de la cinematografía mexicana logrando hitos importantísimos para la época donde se llegaron a producir 82 largometrajes en el país. El origen de la academia, quizás, fue una consecuencia directa de la amplia infraestructura técnica, artística y de mercadeo interno latinoamericano que la academia ya controlaba de buena manera. Además de la necesidad de crear un organismo que, organizara y promoviera diferentes eventos que contribuyeran a exaltar a los profesionales del sector naciendo, de esta manera, el Premio Ariel.
La Academia, en su larga trayectoria ha tenido importantes modificaciones y estructuraciones, sin embargo siempre ha procurado mantener la esencia y el propósito con el que fue creada inicialmente, “Promover la difusión, la investigación, la preservación, el desarrollo y la defensa de las artes y las ciencias cinematográficas”. La Academia ha mantenido una revisión integral de sus estatutos para estar acorde con las necesidades actuales de la cinematografía mexicana y del mundo, dando como resultado la actualización de las categorías que se consideran para ser reconocidas con el Ariel; la conformación de un Comité de Elección de Ganadores del Ariel y de un Comité de Elección de las películas que representan a la cinematografía mexicana en los Premios de las Academias de España y de Estados Unidos.
JUNTA DIRECTIVA
Leticia Huijara
Presidente
Inna Payán
Vicepresidente
Daniel Hidalgo
Secretario
Mónica Lozano
Tesorera
PREMIOS ARIEL
Los premios Ariel son el máximo reconocimiento que la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas otorga a los profesionales, técnicos, artísticos y creativos que cada año contribuyen a la excelencia y calidad del cine mexicano. Se entregó ininterrumpidamente desde la primera ceremonia que llevó a cabo la Academia, el 15 de mayo de 1947, hasta 1958, cuando la situación crítica que vivía el cine mexicano llevó a la suspensión de la entrega del Ariel. La Ceremonia del Ariel se reanudó en 1972 y continúa realizándose hasta la fecha.
Su nombre, Ariel, nace bajo la influencia del libro homónimo del escritor uruguayo José Enrique Rodó, en 1900, en el que simboliza al personaje Ariel con ideales de unidad y defensa de la vasta y profunda cultura de América Latina. El Ariel de Rodó también es un canto al espíritu libre, al heroísmo en la acción y al afán de excelencia en el arte.
La estatuilla fue creada por el escultor mexicano Ignacio Asúnsolo, en ella se representa a un hombre en actitud de emprender vuelo, un símbolo del espíritu idealista de nuestra raza y del anhelo de la ascensión del cine mexicano. La figura está fundida en plata y montada en una base piramidal de mármol negro.